Soy bastante fan de Love of Lesbian.
Lo suficiente como para comprar entradas para el concierto de fin de gira con un año de antelación, e ir a Madrid a verlos.
Claro que Madrid no necesita excusas. Siempre es un buen plan.
Después he visto que no soy tan fan, porque no grito cuando sale Santi Balmes al escenario, ni me sé todas las canciones. Para esto tienes que ser muy groupie. Son difíciles y complicadas.
Mi amiga S. se las sabe todas, y además sueña con Santi, con que canta solo para ella, y con que las 17.000 personas que llenaron el Wizink eran puro atrezzo.
Esa pasión. Me encanta.
Ella también me encanta. Es una de esas personas que tiene una luz especial, que se contagia y con la que siempre te lo pasas bien.
Así que coincidir con ella, aunque fuera a ratitos durante el fin de semana, ha sido un placer. Y ver a Santi. Que, por cierto, cantó con Leiva y eso ya es el súmmum.
Los que seáis fans, me entenderéis.
S. siempre dice que le gustan mis recomendaciones, y que las sigue muy de cerca.
Ella, que ha pegado mil tiros y que es una bonne vivante dónde las haya. A mí también me gustan las sugerencias que comparte.
Madrid ha sido un gustazo. Hemos descubierto sitios nuevos, muy chulos, que nos venían bien recomendados.
Y yo los he compartido con otra amiga que, casualmente, también es fan de Santi, y que este finde está en Madrid.
Mola compartir las cosas que te gustan. Con las personas que quieres, y que sabes que las van a disfrutar tanto como tú.
Si llevas tiempo por aquí, ya sabes que una de mis frases favoritas es:
Compartir es vivir. Y vivir es amar.
Hasta aquí mi historia de hoy. Que va de compartir. Y de amigas que molan, bandas que molan y ciudades que molan.
Y, ¿ya está?
Pues sí. Bueno, vaya, que por si no has sabido leer entre líneas, lo que te estoy pidiendo es que compartas mis historias con personas a las que crees que les puedan gustar.
¿Para qué? Si a ti te gustan, compartirlas con las personas que tienes cerca es un acto de amor.
Y si cada persona que me quiere, me comparte con otra persona, imagínate cómo crecería esto. La leche.
¿Es fácil? Mucho.
Solo tienes que reenviar este mail a alguien diciéndole:
––Mira, lee esto. Te gustará. Y suscríbete, que aquí, la Moni, siempre cuenta cosas interesantes.
Y listos.
Ahí te lo dejo. Sin presión.
G R A C I A S.
P.S. Ya que estamos compartiendo, algunas cositas top que he disfrutado en Madrid:
La Librería Tipos Infames. Libros y vinos. Son muy amables y el espacio es genial. Allí compré un libro de Joyce, que me recomendó Jacobo Bergareche. Por cierto, su último libro también es muy recomendable. Aquí lo tienes.
Pasear por la calle Pelayo. Entrar en todas sus tiendas. Brujulear.
Un cocktail en Salmon Guru. Ve temprano, si no quieres hacer cola.
Unas gambas y una caña en La Paloma. Un clásico para empezar la ruta de tapeo después de un voltio por El Rastro.
Una cenita en petit comité en Gota. Vinos naturales y vinilos. Me encantó.
Tengo un montón de cosas más. Si las quieres, escríbeme.
P.S. 2: Si has decidido compartir, puedes enviar también este enlace, con (casi) todas mis historias.
Este mail tiene 574 palabras. Ya me ‘peté’ el reto de bajar de las 400.
Es que Madrid es mucho Madrid.
50 minutos para escribirlas y 15 minutos para editar el mail. Algunos más comiendo y bebiendo para compartir recomendaciones.
-> Si has llegado aquí por casualidad y quieres recibir más mails como este…
-> ‘Compartir es vivir’, así que, si te ha gustado este email, compártelo con alguien a quien también pueda gustarle o serle útil. (¿VES? Otra vez la frasecita).
-> ¿Quieres contarme algo? Avanti…
Ha sido un encanto hacer coincidido con S.